A Benildo Castillo

Allá en el barrio de Vargas
del Puente Ortiz pallacito,
en una de aquellas casas
vive Benildo Castillo.

Es el mejor decimero
que conozco yo en la costa
él prontamente riposta,
él es quien salta primero
inspirado mensajero,
son dulces, precisas, amargas,
no son cortas, no son largas
las décimas que compone,
las repasa, las repone
allá en el barrio de Vargas.

Tumaco está muy contento
de tener este poeta
de ligero pensamiento
y de lengua muy inquieta
tiene la lengua inquieta
y pronuncia rapidito
parado y muy quietecito
la gente queda perpleja
en una casa muy vieja
del puente Ortiz pa`llacito.

Por alli me fui metiendo
leyendo su poesía
la décima, me decía
es cosa de ir oyendo
de decir, de ir repitiendo
de recitarlo en las plazas
tu retrocedes y avanzas
el me decía con risas
mientras soplaba la brisa,
en una de aquellas casas.

La gente que va pasando
en Tumaco por sus calles
escuchan con gran detalle
si lo oyen declamando,
a todos va saludando
con tono bajo, sencillo
mente clara, con brillo,
en la puerta de su casa
observa gente que pasa
el buen Benildo Castillo.

Bra, VII-2-89